
Vámonos hoy de paseo compañera, vámonos a recorrer ese pedacito de mundo que tenemos, de compartir nuestros pasos por los mercados, por la vida que pasa a nuestro lado, dame tu risa hermana, seamos por segundos, por milésimas de microsegundos solo mujeres con sueños aun por nacer, volvamos al tiempo de ser solo de nosotras y no del reloj que pasa para recoger a los niños, preparar la ropa, o ir al trabajo, de mirar las cuentas que no llegan y esa rutina diaria que nosotros mismos hemos escogido por amor a nuestra sangre, para que todo tenga un orden, en este mundo de desorden, por eso hoy compañera, cálame ese sombrero que hemos visto en los almacenes, hagamos ruido a nuestro paso, y seamos ruidosas y alegres, y entre café con leche y cerveza, y tortita con nata y boquerones, ese metre, que parece que le gusto yo, pero que es mas estirado que la farola que vimos antes, vemos que la gente vive a nuestro alrededor, ajena a nuestras tragicomedias diarias, a nuestro sentir, y parece que ellas están en un teatro con palco, y nosotras en el gallinero, pero donde se cuece la verdadera critica de la obra,
Vámonos a sentirnos importantes, volviendo loco de risa al vendedor de neveras y microondas, y tírame de la cazadora, para que no me vaya a la sesión de viajes y encargue uno, allí justito donde se encuentra mi corazón, porque un poco mas y pico la corazonada y no escucho la sensatez de madre de una adolescente y tírame de nuevo de la cazadora, mientras yo te jalo a ti, para que no te vuelvas a ir de nuevo a países extraños y donde si te vas, sabes que tienes que pagar como yo, el pasaje de regreso con interés y con sentimiento de cargo, y señor maître; por favor, póngame usted una de churros y café con leche y para mi una cerveza con boquerones, y vámonos ya para el supermercado, que esta noche y mañana no tengo nada, y el lunes viene ya la nevera, y que bonito es pasear y reírse con la gente, y mirar la vida entre los ojos de las personas, y ser las reinas por un día, mientras la fuerza y la promesa sin sello de sangre se pacta, y donde sin querer, y por cariño, vislumbro tu alma y me callo, porque veo lo que no quieres mostrar, y en esa lagrima compañera entiendo mas de mil cosas y callo y hablo de mil temas más, y mientras más me rio contigo, mas te quiero, y mientras más disfruto de la vida junto a ti, mas me digo, mereció la pena esta libertad condicional de carcelaria con permiso de tercer grado, pues en ella voy contigo de compañera y le digo al dependiente, por favor.; nos puede enseñar aquellas…., mientras nuestra vida da vueltas entre él y venir de la gente.
Podrán pasar mil años, o mil vidas, podrán pasar miles de cosas, y también cambiar todo en un segundo, pero el amor y la admiración que siento por mi amiga leo, esa, y de seguro, me acompañara siempre,